domingo, 24 de enero de 2010

Conocidos muchos, amigos pocos.



La amistad es algo único, especial. La amistad hay que cultivarla, no dejarla escapar, saberla apreciar.

Jamás te das cuenta de que tienes a un verdadero amigo, hasta que lo pierdes. ¿Por qué somos tan idiotas?. ¿Por qué dejamos ir a una persona, que siempre estuvo ahí, que era verdadera, que jamás te fallo, por simplemente un malentendido?.

No entiendo al ser humano, no puede, no soporta estar en la soledad, pero aparta a su compañía.

No tiene sentido tener mucha gente a tu alrededor, si ninguno es un verdadero amigo. Estando tan acompañado te sientes tan solo.

Aunque lo cierto es que un verdadero amigo se hace con el tiempo, no solo porque te ayudo una persona una vez será tu mejor amigo, pues un mejor amigo es la persona que más se parece a ti, la que te comprende, la que sin juzgarte te muestra el mejor camino; obviamente no se encuentra alguien así de la noche a la mañana.

No vale la pena perder un amigo por el orgullo, simplemente siendo orgullosos quedamos más solos, menos felices y más arrepentidos. Mucha gente no entiende el poder de este sentimiento -el orgullo-, mucha gente cree que son los que tienen la razón porque no pueden echar para atrás su decisión, por el orgullo.

No por no tener ese amigo, se debe dejar de ser un amigo. Porque aunque esa persona para ti no sea tu mejor amigo, tal vez tu para esa si. No es justo lastimar a una persona, porque tu estás lastimado.

La conclusión: Conocidos muchos, amigos pocos.

Sabrás que un amigo es amigo, cuando los años ya hayan pasado, cuando la vida no los haya separado, cuando te des cuenta que siempre a estado.

Abril Masó.

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