domingo, 25 de abril de 2010

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A veces... decir algo que jamás pensaste atreverte a decir-algo realmente repugnante-, ignorar a la persona que no quieres que se aleje de tu lado; provocando una decepción, cometer un error sin querer arrepentirte, poder hablar, opinar y actuar como te de la gana-sabiendo que esta mal-.. Y todo eso sin que los demás hablen al respecto o te miren mal.

¿Por qué no?
¿Por qué es malo hacer las cosas que los demás dicen que es algo indebido?
Es la opinión de los demás, no la de uno. Para la persona que hace la acción "indebida" es algo natural, nada del otro mundo, algo relativamente bueno. Lo que vale es lo que piensa uno mismo, ¿no?

Vivir en un mundo en el que las personas son amargadas, aburridas, poco interesantes, personas que viven asustadas la mayoría del tiempo. Realizar todos los días la misma rutina, sabiendo que podrías hacer algo mejor.

¿No es mejor desatarse, divertirse, volverse loco?

Simplemente esa acción es mala o un caso de inconciencia, porque nadie acostumbra a realizarla, porque le pueden tener miedo, porque creen saber la diferencia entre lo correcto y lo incorrecto, porque realmente no saben de lo que se pierden.

Los locos, los mandan a un hospital psiquiátrico muchas veces por intentos de homicidio, porque se crean una vida para ellos solos, porque son diferentes. Realmente, ¿te parece justo mandar a una persona a un hospital psiquiátrico porque piensan diferente o han intentado hacer cosas que a los demás les parece algo malo?

Porque resulta que un loco es una persona que no padece la enfermedad de la amargura, pues padece la enfermedad de la locura, del atrevimiento.

Entonces hacer una acción resulta malo o bueno, si tú la crees mala o buena. No dándole importancia a otras opiniones, pues es tu elección padecer de la amargura o la locura. Aceptando sus consecuencias.



Abril Masó.

domingo, 11 de abril de 2010

Miedo de ti misma.

Un miedo tan grande, un miedo que te provoca el llanto, un miedo que no se irá así de fácil, un miedo que no logras controlar, un solo miedo que se transforma en una pesadilla.

Un descontrol gigante de ti misma, el poco entendimiento de lo que ocurre a tu alrededor, la poca importancia de lo que te pueda ocurrir, la falta de conciencia que logras obtener.

El olvido de tus metas, el olvido de las personas que te aman, el olvido de lo que eres, el olvido de lo importante, el olvido de la diferencia entre el bien y el mal, el olvido de todo antes de ese día.

Ese día en el que te sentiste inferior bajo tu consentimiento, en el que cometiste errores, en el que defraudaste a personas que no lo merecían, en el que no tenías excusas, en el que no eras nadie.

Porque antes la imagen que tenían de ti los demás era la imagen que creías que expresaba lo que eras, lo que sentías, lo que pensabas. Esa imagen, luego de ser siempre la misma, la buena, la comprensible, la que sin querer era perfecta, esa imagen no pudo demostrar lo que era en verdad, se guardó sentimientos negativos, oportunidades de experimentar algo diferente, de ser quien necesite ayuda, le faltó ser la imagen que demuestre desinterés, de poder ser libre, decir y hacer lo que le de la gana. Eso no lo pudo cumplir, porque jamás se atrevió.

Traería muchas consecuencias intentar cambiar de un día para otro. Se resigno a ser lo que siempre fue sin ningún cambio, se dio cuenta que podía vivir así.

Ese día se dio cuenta que era tan perfeccionista como la imagen, que no era el tipo de persona atrevida. Ese día se dio cuenta que siempre habrá un espacio de rebeldía en ella.

El miedo del comienzo es el miedo de ella misma, porque tiene miedo de realizar un acto de incoherencia, un acto de cambio en su vida.

Cuando este decidida, jamás volverá a ser lo que fue.

Realmente no se sabe si ese día llegará.


Abril Masó.

jueves, 8 de abril de 2010

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''Dejar reflejar lo que hay en ti''

Trato pero no puedo.
Cada vez puedo menos.
Es como sí, lo sé todo, lo siento todo, lo pienso todo, lo aprecio todo. Pero sólo un lápiz y una hoja de papel me ayudan a crecer.
Puedo llorar, como también puedo reir.
Pero nunca se comparará con los llantos o las risas que boto mientras escribo.
Cuando escribo me siento como un pájaro solitario, que vuela a lo alto, con lo que mas amaría, su viento en la cara y las nubes saludandolo, pero a fin de cuentas, está solo.
Así me siento yo, y no maliterpreten, no es triste, hay que pensar así: Cuando no escribes. ¿Qué haces?. Cualquier otra cosa. ¿Cierto? Bueno, puedes estar con toda la gente que amas pero siempre necesitarás un tiempito, solo un tiempito, de olvidarte del mundo, de olvidarte de que tocas la tierra, de olvidarte de que cada día quieres algo mejor y simplemente, dedicar esos minutos a ti. Mis minutos para mi, son escribir.
Si, muchas veces quiero irme a un lugar donde no conozca a nadie y mucho más importante, donde nadie me conozca a mi, cuando quiero irme a ese lugar, escribo.
Mi paraiso, ese es mi paraiso.

Maf.

Nuevo

En estos días hay algo que está cambiando.
Lo siento, lo siento muy dentro de mi.
Siento la profunda brisa que atraviesa tu sangre y te alegra.
Lo más absurdo es que yo sé lo que pasa y aun así busco mas respuestas.
Soy feliz.
Si, te extraño, es verdad, pero al fin algo dentro de mi hizo un ''tic'' y prendió el motor para notar que con aferrarme a la nostalgia no llegarás mas rápido. Si llegas, estaré esperando. Si no lo haces, es que sencillamente nunca fuiste parte de mi ser.
Lo que más me lleno de felicidad diría que fue la fé. Todo lo que he visto, me ha enseñado a confiar en Dios de todo lo que no he visto.
Unos pocos viejos amigos y unos cuantos nuevos son los que me han hecho perder el miedo a ''sólo vivir''.
Gracias por todo si fuiste uno de ellos.
Y es que sinceramente, siempre te llenarán los que menos piensas.
Y si, si hay un cambio, estoy diferente, pero estoy aqui.
Y de un momento a otro, cuando por fin encontré todas las respuestas, cambiaron todas las preguntas.

Maf.

martes, 6 de abril de 2010

Cada mañana, misma rutina, mismo olor, mismo carácter, mismo paisaje, para que al final del día digas: ¡Qué día tan especial!


Abril Masó.


¿Qué se oculta en el correr?
Es simplemente diversión, un juego de esos que consiste en llegar lo más lejos posible, o es escapar de tus pensamientos, de tu conciencia, de aquello a lo que le temes inmensamente, de lo que no eres capaz de controlar.




Abril Masó.


Gotas caen, gotas caen... algunos se quejan otros bailaran, eso no cambia lo que ocurrirá, pues la lluvia no cesará.




Abril Masó.

Una vela para alumbrar
las tristes noches en las que la luz se va.
Una vela para recordar
que aún con la oscuridad,
siempre la luz se ha de encontrar.



Abril Masó.

Las calles desiertas abundan cada día más, pues el miedo inunda a cada hombre por igual.


Abril Masó.